sábado, 8 de febrero de 2014

Judaísmo conservador

El Judaísmo Masortí (Conservador) surge en Alemania a mediados del siglo XIX como una reacción al judaísmo reformista, posicionándose como una síntesis entre este último y el judaísmo ortodoxo. Junto a estos dos, el judaísmo conservador es una de las tres grandes corrientes religiosas del judaísmo. El judaísmo conservador se institucionalizó en los EE. UU. alrededor del 1900.
El conservadurismo postula la devoción a la tradición y ley judía (masoret y halajá), con un acercamiento abierto y positivo al mundo moderno, la democracia y el sionismo.
Los principios del Judaismo Conservador incluyen:1
  • La "dedicación a la Halajá... [como una] guía para nuestras vidas".
  • Una enseñanza no fundamentalista de los principios de la fe judaica.
  • Una actitud positiva hacia la cultura moderna.
  • Una aceptación tanto de los métodos tradicionales-rabínicos como de los académicos y críticos en lo que al estudio de los textos religiosos del judaísmo se refiere.
El Judaísmo Conservador tiene sus orígenes en la escuela conocida como el positivismo histórico judaico, desarrollada en 1850 como una reacción a las posiciones más liberales adoptadas por el Judaísmo Reformista. El término conservador denotaba la intención de la corriente conservadora de conservar la tradición, en lugar de reformarla o abandonarla. El uso de dicho término está totalmente desprovisto de sus connotaciones políticas.
Para evitar las confusiones a las que el término invita, algunos de sus rabinos en los EEUU y Canadá2 proponen utilizar el término Masortí, denominación que ha sido adoptada por las divisiones israelí y mundial del movimiento. La palabra masortí en hebreo significa tradicional.

Judaísmo ortodoxo

El judaísmo ortodoxo es una de las ramas de la religión judía en la actualidad, junto con el Judaísmo reformista y el Judaísmo conservador o masortí. Se distingue de ellas por su adhesión rigurosa a la Halajá. Carece de una autoridad doctrinal central permitiendo cierta variación en la práctica. Afirma que la festividad de pésaj, el shabat (sábado) y todos los preceptos de la Torá (tanto la escrita como la que llaman parte "torá oral"), fueron entregadas por Dios mismo a Moisés hace unos 3.323 años en el Monte Sinaí. Creen que Moisés a su vez enseñó estas leyes a todo el pueblo israelita, que como una sola entidad aceptó cumplirlas antes de saber en qué consisten o el porqué de cada una de ellas, con una disposición única de entidad indivisible. De acuerdo a su actitud hacia la cultura contemporánea, el judaísmo ortodoxo se divide informalmente en judaísmo ortodoxo moderno, que busca adecuar hasta algún punto sus prácticas y estudios a la situación social contemporánea, aunque es firme con respecto a la halajá, el sionismo religioso que liga el judaísmo ortodoxo con el sionismo y el judaísmo haredí, que rechaza toda innovación que sus líderes consideren contraria al espíritu de la Torá.
El Judaísmo ortodoxo nació como respuesta adversa al crecimiento del Judaísmo Reformista en la Alemania del siglo XIX. Éste se guía principalmente por la Halajá o ley judía especificada en el Talmud y codificada en el Shulján Aruj. Estos a su vez se basan en la Torá. Considera que las leyes fueron entregadas no solamente a esta generación, sino también dirigidas a todos sus descendientes, y contienen en sí todas las facetas que se puedan pensar que requieran su aplicación.
Creencias
El judaísmo ortodoxo basa sus creencias en los 13 principios de fe de Moisés Maimónides. Sus principios son:
  • La existencia de Dios
  • La eternidad, la singularidad y la unidad de Dios
  • La naturaleza espiritual y abstracta de Dios
  • Sólo a Él y no a otro se deben dirigir nuestras oraciones
  • Moisés es el mayor y principal profeta
  • Dios entregó la Torá en el monte Sinaí y no puede ser cambiada
  • Dios conoce los futuros actos humanos
  • Dios recompensa la bondad y castiga la maldad
  • Dios mandará a un Mesías
  • Dios resucitará a los muertos

Judaísmo reformista

El Judaísmo reformista (hebreo: יהדות רפורמית) es una de las grandes ramas de la religión judía (Judaísmo rabínico) en la actualidad, de origen Ashkenazí, junto con el Judaísmo ortodoxo y el Judaísmo conservador o masortí'. De estas tres ramas, el reformismo es la de mayor antigüedad. El Judaísmo reformista (también llamado "progresista" y "progresivo") defiende la autonomía individual en lo relativo a la interpretación de los preceptos religiosos (hebreo: מצוות / mitzvot).1

El "espíritu reformista" en el Judaísmo tiene sus antecedentes en el profeta Nehemías (hebreo: נחמיה) y sus reformaciones entre 431 y 430 antes de la Era Común. [1]. Incluso figuras como el Gaón de Vilna, en tiempos más recientes, mostraron actitudes de claro pensamiento reformista. Sin embargo el Judaísmo Reformista de la modernidad es una de las corrientes herederas del judaísmo Progresista o Liberal que aparece en Alemania durante el Siglo de las Luces, aunque hoy en día difiere significativamente de éste. A su vez estas corrientes fueron influídas por la Haskalá (en hebreo: השכלה; "Iluminismo", "educación", de la raíz sekhel "intelecto", "mente"), también conocida como el "Iluminismo judío". La Haskalá fue el movimiento que se desarrolló en la comunidad judía europea a fines del siglo XVIII que tomó los valores del siglo de las luces, buscando una mejor integración con el entorno e incrementar la educación del hebreo, la historia judía y demás conocimientos seculares, fuera del ámbito de la escuela religiosa o yeshivá. En el Siglo XIX, en un entorno histórico de evolución hacia la emancipación de los judíos, las tensiones entre la sociedad moderna y el modo de vida de las comunidades hebreas tradicionales se agudizaron.

Jaredí (Judaísmo ultraortodoxo )

Los jaredíes (en hebreo חרדים, jaredim), también conocidos como ultraortodoxos o como Los que temen a Dios, son judíos ortodoxos cuya práctica religiosa es especialmente devota. Los jaredíes afirman, al igual que todo el judaísmo ortodoxo que la Torá entregada en el Monte Sinaí por Dios, con sus respectivas leyes, constituye el "manual de instrucciones del mundo". En otras palabras, la Torá es el código que permite, en términos fundamentales, el comportamiento armónico de la Creación y los creados, la regulación sus leyes y principios, y los métodos que llevarán a cada individuo a unirse a Dios para disfrutar del deleite infinito, máximo objetivo de la creación del mundo.
Sin embargo, a pesar de que otros grupos judíos ortodoxos (ya sean jasídicos u ortodoxos modernos) aceptan esta afirmación, hay diferencias entre todos los grupos en cuanto al comportamiento en ámbitos no legales; es decir, en el ámbito de la cosmovisión individual y colectiva, que no está reglamentada por la Torá.
Los jaredíes suelen vivir al margen de las sociedades laicas que los rodean, incluyendo las judías, debido a que intentan poner en práctica los preceptos bíblicos en un ámbito no-hostil. Hoy en día muestran una fuerte presencia en Israel, donde cuentan con su propios barrios (e, incluso, sus ciudades), sus partidos políticos, sus comercios y sus escuelas. También existen grupos de jaredíes en muchas comunidades judías de la diáspora, particularmente en Estados Unidos y Europa Occidental. Los jaredíes tienen su propio periódico, llamado Hamodia.
Desde finales del siglo XIX, el sector israelí de los jaredíes rechaza parcialmente la «modernidad» occidental, tanto en lo que se refiere a costumbres como en lo que toca a la ideología. Sin embargo, esta postura no es unánime en el mundo jaredí. Por caso, aquellos oriundos de EE.UU. poseen una visión más inclusiva de la modernidad que la que prevalece entre los israelíes.

judaismo

La palabra judaísmo se refiere a la religión, la tradición y la cultura del pueblo Judío. Es la más antigua de las tres religiones monoteístas más difundidas (junto con el cristianismo y el islam), conocidas también como «religiones del libro» o «abrahámicas», y la menor de ellas en número de fieles. Del judaísmo se desglosaron, históricamente, las otras dos religiones.
Aunque no existe un cuerpo único que sistematice y fije el contenido dogmático del judaísmo, su práctica se basa en las enseñanzas de la Torá, también llamada Pentateuco, compuesto, como su nombre lo indica, por cinco libros. La Torá o el Pentateuco, a su vez, es uno de los tres libros que conforman el Tanaj (o Antiguo Testamento, según el cristianismo), a los que se atribuye inspiración divina.
Juega también un papel importante, en la práctica religiosa, la tradición oral. Según las creencias, fue entregada a Moisés junto con la Torah y conservada desde su época y la de los profetas. La tradición oral rige la interpretación del texto bíblico, la codificación y el comentario. Esta tradición oral fue transcrita, dando nacimiento a la Mishná, que posteriormente sería la base del Talmud y de un enorme cuerpo exegético, que se desarrolla hasta el día de hoy por los estudiosos. El compendio de las leyes extraídas de estos textos forman la denominada Ley Judía o Halajá.
El rasgo principal de la fe judía es la creencia en un Dios omnisciente, omnipotente y providente, que habría creado el universo y elegido al pueblo judío para revelarle la ley contenida en los Diez Mandamientos y las prescripciones rituales de los libros tercero y cuarto de la Torá. Consecuentemente, las normas derivadas de tales textos y de la tradición oral constituyen la guía de vida de los judíos, aunque la observancia de las mismas varía mucho de unos grupos a otros.
Otra de las características del judaísmo, que lo diferencia de las otras religiones monoteístas, radica en que se considera no sólo como una religión, sino también como una tradición y una cultura. Las otras religiones trascienden varias naciones y culturas, mientras que el judaísmo se considera la religión y la cultura concebida para un pueblo específico. El judaísmo no exige de los no judíos unirse al pueblo judío ni adoptar su religión, aunque los conversos son reconocidos como judíos en todo el sentido de la palabra. Asimismo el judío ha sido comisionado por sus escrituras a ser "luz a las naciones" y propagar el Monoteísmo Ético por todo el mundo. La religión, la cultura y el pueblo judío pueden considerarse conceptos separados, pero están estrechamente interrelacionados. La tradición y la cultura judía son muy diversas y heterogéneas, ya que se desarrollaron de modos distintos en las diferentes comunidades, y cada comunidad local incorporó elementos culturales de los distintos países en los que vivieron los judíos a partir de la dispersión.

jueves, 6 de febrero de 2014

sociología de la religión

La sociología de la religión es el estudio de los comportamientos, estructuras sociales, evolución y de los roles de las religiones en las sociedades humanas. Intenta explicar la influencia que la religión tiene en el comportamiento colectivo del hombre y vice-versa, es decir, las interacciones recíprocas entre religión y sociedad.